16 de abril de 2013

Ante el rol de la UNLP frente a la catástrofe en La Plata


El pasado viernes 12 de abril más de 700 estudiantes nos encontramos en una asamblea interfacultades e interestudiantil (con estudiantes secundarios y terciarios) llamada desde la Federación Universitaria de La Plata y propuesta en las asambleas por facultad. El objetivo fue debatir acerca de la catástrofe que azotó a la ciudad la semana anterior y mantener la organización lograda a partir del trabajo solidario de muchxs estudiantes y jóvenes de todo el país.

El consenso más claro en la asamblea fue que, a pesar de las fuertes lluvias, la catástrofe tiene claros responsables políticos. Los gobiernos de Bruera, Scioli y Cristina Fernández fueron los que no garantizaron la infraestructura necesaria y priorizaron el negocio inmobiliario con el crecimiento desregulado de la ciudad, aún cuando existían estudios que preveían lo sucedido.

Sin embargo, también reparamos en el rol pasivo y desprolijo que tuvo la Universidad Nacional de La Plata. La gestión del rectorado no tuvo la capacidad de ponerse a la cabeza del trabajo solidario y de la recepción y el reparto de las donaciones. Tampoco puso sus recursos profesionales, técnicos y materiales al servicio del pueblo. Su prioridad fue claramente profundizar su relación con los gobiernos, aportando a la pantalla mediática que se intentó tender para proteger a la clase gobernante. Esta línea política tiene su continuidad en el desconocimiento por parte de la UNLP del relevamiento independiente llevado adelante por el Colegio de Trabajadorxs Sociales de la Provincia de Buenos Aires.

Por otro lado, el rectorado demostró una gran incapacidad para que las facultades lleven adelante una política en conjunto. No pudo imponer sus resoluciones a la gestión de cada facultad para que se suspenda el dictado de las clases y que cada unidad académica se ponga a disposición del pueblo en este momento tan terrible.

Incluso no tuvo una iniciativa clara, rápida y contundente para lxs estudiantes y trabajadorxs de la UNLP que se vieron damnificadxs. La respuesta llegó luego de que lxs estudiantes, nucleados en la FULP, le exigieramos la creación de una partida presupuestaria extra para el otorgamiento de becas.

Sin embargo, la inmobilidad en la que cayó la UNLP durante el conflicto tiene antecedentes previos a la tormenta. La UNLP contaba con varios estudios de arquitectura, urbanística e ingeniería hidráulica que preveían esta situación y no tomó un rol activo como institución. Los estudios salieron a la luz luego de la catástrofe, pudiendo haberse evitado el número de daños y víctimas fatales.

El rol de las facultades

La incapacidad política del rectorado a la hora de alinear a las facultades bajo una acción unificada se demostró en la heterogeneidad de medidas que tomó cada gestión.

Así, hubo facultades que continuaron las clases como si no hubiera pasado absolutamente nada. Tal es el caso de la Facultad de Ciencias Económicas o la de Veterinarias. La suspensión de las cursadas en algunos casos se debió a la falta de luz o de agua en los establecimientos, pero nunca se pensó la forma de poner a disposición los recursos profesionales y materiales tras una tragedia de este tipo.

Otro fue el caso de Ciencias Médicas, donde la gestión de Martinez y Hoja de Roble mantuvo el ciclo lectivo incluso cuando un trabajador no docente falleció durante la tormenta. El duelo no fue decretado, a pesar del dolor de sus compañerxs, y las clases continuaron.

En la facultad de Ciencias Jurídicas la falta de iniciativa fue acorde a las otras unidades académicas, llegando a momentos de tensión como cuando un docente se burló y maltrató a una compañera damnificada por el temporal.

Por otro lado, existieron facultades que se pusieron a disposición de lxs damnificadxs, aunque algunas dejaron mucho que desear. El caso más emblemático fue la facultad de Periodismo. Su edificio se convirtió en una Unidad Básica del kirchnerismo, acaparando la mercancía y yendo a distribuírla varios días después de la catástrofe. Inmediatamente después de la tormenta la facultad se encontró militarizada, debiendo los estudiantes dejar sus datos a la Gendarmería Nacional para poder ingresar.

Desde la Federación Universitaria de La Plata y como resolución de la Asamblea Interfacultades e Interestudiantil, expresamos nuestro enérgico repudio a la actitud tomada por la UNLP y las facultades de Económicas, Veterinarias, Ciencias Médicas, Ciencias Jurídicas y Periodismo.

Convocamos a lxs estudiantes de todas las facultades a garantizar un paro activo estudiantil y a seguir organizadxs en asambleas para mantener vivo el trabajo solidario y el repudio a los responsables de esta catástrofe.
  
FULP
Federación Universitaria de La Plata